Ya les conté que hace algunas semanas vinimos al Sur de Chile buscando tranquilidad para gestar. En todos estos días hemos vivido en vacaciones, paseos y compartir. Si bien mi hija mayor entró al colegio, también se lo ha tomado con mucha calma y un poco como juego.
Esta semana, sin embargo, mi marido entró a trabajar, conseguí ayuda para mi casa, conocí a un jardinero quien arregló lo verde de la entrada y conseguí trabajo. Es toda una hazaña para una embarazada recién llegada, así es que me siento feliz.
Partí haciendo unas charlas para la Clínica Alemana de la ciudad: acerca de lactancia y puerperio. Luego me uní a un encuentro de lactancia que organizó Medela, junto a Madremía, Puntito de Luz y South Genetics, también haciendo una charla para embarazadas y luego seguí sola.
Es decir, acá en la ciudad hay una librería en donde hacen muchas actividades, arrendé una sala y hago talleres de maternidad. Me gusta mucho, una vez a la semana abordamos la maternidad, embarazo y puerperio desde la psicología. Ha sido una experiencia muy linda.
Paralelo a este trabajo en los talleres para mujeres, estoy trabajando atendiendo niños y niñas en consulta, en la Clínica Puerto Montt. Queda un poco más lejos de mi casa, que los talleres, pero me ha gustado mucho reencontrarme con la psicología clínica y analizar nuevos casos. Es lo que realmente me apasiona.
Por la tarde atiendo en una consulta cerca de mi casa, también analizo niños y atiendo mujeres embarazadas y en puerperio. Ha sido la continuación de mi trabajo que había dejado stand by con el viaje y que la verdad no pensé que sería tan rápido de retomar. Me siento afortunada.
Si bien he tenido que aprender nuevos términos, costumbres, espacios, etc. También he tenido que aprender a habérmelas con la contingencia climática. Ya te conté que llueve más que en Santiago, hace un poco más de frío también, pero nada dramático. Algunas cosas que he aprendido es a descongelar el auto en la mañana cuando la puerta no se abre porque está congelada, la primera vez impacta, porque sueles salir rápido para llegar a tu hija al colegio y te encuentras dentro de la película frozen: la solidaridad del vecino equipado ha sido crucial, me ha enseñado a echarle agua al auto y algunas mañas para que prenda a pesar del hielo. Emilia ha sido la más feliz. La santiaguina loca ve un pedazo de hielo y grita que está nevando despertando a toda la cuadra. Es dulce.
También, y debido al hijo, se ha roto mi caja de cambios, he quedado en panne de batería dos veces y se me rompió una cubierta del auto mal llamada “mata perros” (porque jamás mataría uno) pero todo me lo tomo con alegría y los problemas se van solucionando a medida que pasan. está demás decir que tengo un marido demasiado dulce, que me apoya en todas y que de cada impasse sacamos carcajadas luego. Tengo mucha suerte. La idea es apoyarse de lo que uno tiene y disfrutar esas pequeñas cosas.
Por alguna extraña razón, las personas en esta ciudad cruzan la calle en la mitad de la carretera. Durante la oscura mañana y con neblina, sin ropa reflectante y de manera arriesgada. Algo hay que hacer con la seguridad vial, de verdad que no se ven y cruzan hasta con guaguas. Si a alguien se le ocurre algo por favor me escribe y lo proponemos. Pero es más o menos urgente, me angustia.
¿Y del embarazo? Se me olvidaba! todo super bien. Jacinta Feliz. A veces se me olvida que estoy embarazada.
Varinia
Diario de mi embarazo:
Semana 4 – ¡ Estoy embarazada !
Semana 5 – Comenzaron las nauseas del embarazo
Semana 6 – ¿ Cómo organizar un matrimonio ?
Semana 7 – Viajando a Cincinnati con Pampers
Semana 8 – Tengo síntomas de aborto
Semana 9 – Trekking embarazada
Semana 10 – Exámenes
Semana 11 – Ecografía
Semana 12 – Fiesta de Matrimonio
Semana 13 – ¡ Es una niña !
Semana 14 – Volver al trabajo
Semana 15 – ¿Qué le pasa a mi pelo?
Semana 16 – ¿Cuándo contar que estoy embarazada?
Semana 17 – Los movimientos de Jacinta
Semana 18 – ¡5 meses han pasado volando!
Semana 19 – ¿Por qué la piel del pecho se oscurece?
Semana 20 – Necesito un lugar tranquilo para gestar
Semana 21 – Mudanzas & cajas de música
Semana 22 – ¿Podemos manejar embarazadas?
Semana 23 – Emociones Fetales (¿o fatales?)
Semana 24 – El peso de las palabras
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